Reflexionando mi vida,la que ha pasado tan de prisa, dándome diariamente las cachetadas merecidas con su respuesta que aun puedo hacer lo que me proponga,mirando el antes quien era ,el indeciso de la vida ,el que le daba miedo a todo,el cobarde,el llorón,el sensible,el nostálgico.

Hay cosas de la vida que debo agradecerlas infinitamente ,otras no tan agradables por tan malos recuerdos que me provocan nostalgia y un sentimiento de dolor,aun tengo mis dudas si yo he cambiado o la vida me ha cambiado,me he vuelto vacío por dentro cosas que me falta que nadie las necesita y que en algun momento eran necesarias en mi vida. 

Extraño un poco a ese ser ,ahora soy un reflejo de lo que fui,ocultando mi verdadera esencia frente a la gente,decepcionandome del resto y resguardando la poca sensibilidad que tengo para no sufrir por nadie,huyendo de las que me apedrean con sus palabras ,de las que me abofetean dándome las espaldas cuando mas  los necesito,decepcionandome de la amistad que al principio la creía sincera y hoy se ha devaluado ,tratando de tener mi corazón en una caja fuerte para no sentirme decepcionado por alguna falsa ilusión que creí poder hacerse realidad alguna vez.

Desde ese momento que empecé a luchar a pesar de toda mi vida en contra, apostando tan solo el poco valor que tenía, las pocas ganas que siempre me faltaban.He llegado a donde no pensé llegar en algun instante;ha pasado alrededor de 4 años desde que comencé mi batalla por demostrarme que yo si puedo,claro que en el camino nada fue fácil me he desanimado por terceros pero algo dentro de mi  siempre me daba ese ánimo,  esa fuerza que en algunas ocasiones supieron  ayudarme a ponerme de pie y seguir en mi lucha.

Hoy es difícil volver atrás, hoy me siento cerca del final y con ganas de seguir adelante,Dios sabe cuanto he sufrido cuantas noches de llanto, desesperación,cuantas veces sentí que por momentos toda puerta se cerraba, pero él estuvo siempre pendiente de mi,hoy cerca de todo y lejos de lo que fui, me admiro por ver en mi lo que algun día sentí que me faltaba y eso se llama amor propio.